Recluido en el pabellón psiquiátrico del penal de Ezeiza, Lotocki fue informado de que la Sala III de la Cámara de Casación, compuesta por los jueces Jantus, Magariños y Huarte Petite, confirmó su condena y la elevó de 4 a 8 años de prisión. Esta decisión se basó en las lesiones graves sufridas por varias mujeres, incluyendo a Pamela Sosa, Gabriela Trenchi, Stefanía Xipolitakis y la fallecida Silvina Luna, cuya muerte no fue considerada un homicidio.
Además de la pena de prisión, Lotocki fue inhabilitado para ejercer la medicina durante diez años. La condena también incluyó un cargo por estafa contra Gabriela Trenchi. Este dictamen se suma a otro caso relacionado con el médico, donde la Sala IV de la Cámara Criminal y Correccional ordenó su detención por el homicidio simple de su paciente Cristian Zárate, procesamiento que fue confirmado recientemente.
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El uso del metacrilato, material inyectado por Lotocki, se destacó como un elemento crucial en las acusaciones. El extenso fallo de 143 páginas señala que, a pesar de los efectos perniciosos conocidos, Lotocki persistió en realizar las mismas intervenciones quirúrgicas en sus pacientes a lo largo de un considerable período. La cronología detallada en el fallo revela una sorprendente continuidad en la práctica médica a pesar de las advertencias de las víctimas sobre los daños causados por el uso de dicho material.
En este contexto, los plazos de la condena y la inhabilitación para ejercer la medicina se duplicaron, marcando un giro negativo en la situación legal de Lotocki. Sin embargo, la muerte de Silvina Luna, vinculada a las lesiones provocadas por el médico, aún no se considera un homicidio.
