Por primera vez en tres años, la capital de Irak, Bagdad, ha sido testigo de un doble ataque suicida en el centro de la ciudad. El hecho ocurrió este jueves en la Plaza Tayaran, donde al menos 35 personas murieron y otras 110 resultaron heridas. Los reportes indican que es el peor ataque de este tipo que ha sufrido la capital iraquí en los últimos años.
El atentado se perpetró en el área comercial de Bab al-Sharqi, en el centro de la ciudad, cuando según el Ministerio del Interior, el primer atacante fingió estar enfermo para atraer a una multitud y luego detonó sus explosivos. Un segundo atacante apuntó a civiles mientras recogían a los heridos. Las autoridades iraquíes le atribuyen el atentado al Estado Islámico, aunque hasta ahora ni ese ni ningún otro grupo armado ha dicho ser responsable.
Las fuerzas de seguridad iraquíes desplegaron a sus agentes y bloquearon las carreteras más importantes de la ciudad para evitar posibles nuevos ataques, según le dijeron funcionarios a la agencia Reuters.
