La eutanasia y el suicidio asistido siguen siendo un debate pendiente en la gran mayoría de los países. Sin embargo, Suiza es un país donde el suicidio asistido es legal y por tal motivo se ha legalizado Sarco, una cápsula que permite morir de manera indolora. Las reacciones que puede producir en el usuario son desorientación y una ligera euforia antes del desenlace final.
El invento fue creado hace un par de años por Philip Nitshke, físico y humanista australiano. En cuanto a sus características, se trata de una cápsula que puede ser construida con una impresora 3-D, se transporta fácilmente en caso de necesitar su traslado y se activa con botones desde su interior o incluso con un parpadeo. El oxígeno del compartimento es reemplazado por nitrógeno en cuestión de segundos provocando la muerte en un lapso entre 5 y 10 minutos.
La fecha para comenzar a utilizar este producto será en 2022. Por el momento, solo se dispone de prototipos aunque la versión final ya aprobada se encuentra en fabricación en Holanda. Respecto a las normativas reguladoras, su creador confesó que no encontró quejas ni resistencias por las autoridades del Estado, lo que allanó enormemente el camino hacia la concreción de este proyecto.
