En un giro inesperado en el caso del robo millonario perpetrado en pleno Centro de la ciudad de Córdoba, el Fiscal de Instrucción del Distrito 1, turno 2, Guillermo González, dispuso el pasado sábado la libertad de Maximiliano Tejerina, un joven con parálisis cerebral, detenido en relación con el hecho. Sin embargo, la investigación continúa su curso, manteniendo la imputación en su contra.
El episodio, que tuvo lugar el pasado viernes en la intersección de Rivera Indarte y Humberto Primo, generó conmoción entre los familiares de Tejerina, quienes insisten en su inocencia y califican el suceso como un error judicial. Según el comunicado del fiscal, Tejerina fue aprehendido en flagrancia, encontrándose en su posesión parte del dinero robado, situación respaldada incluso por testigos civiles.
A pesar de este hallazgo, González optó por la liberación del joven, argumentando la carencia de antecedentes y la falta de indicios de peligrosidad procesal. No obstante, la imputación se mantiene y el proceso penal continúa, siendo transferido el caso al fiscal natural por jurisdicción territorial, José Bringas, a partir de este lunes.
El caso de Tejerina, un profesional egresado de la Facultad de Matemática, Astronomía, Física y Computación (Famaf) de la UNC, y actualmente empleado en la empresa Globant, ha suscitado interrogantes debido a sus condiciones físicas. Según su esposa, Elizabeth, Maximiliano padece de diversas limitaciones físicas y del habla debido a un traumatismo intracraneal sufrido en su infancia, lo que plantea serias dudas sobre su capacidad para participar en un robo, como se le acusa.
“Resulta imposible que pueda conducir un automóvil o una motocicleta, como así tampoco arrebatar rápidamente el bolso a la víctima o forcejear con la misma para intentar quitárselo”, declaró Elizabeth, visiblemente consternada por las acusaciones contra su esposo. El proceder de las autoridades policiales y del Ministerio Público Fiscal (M.P.F.) en el Centro de Recepción de Aprehendidos fue respaldado en el comunicado de la fiscalía, considerándolo correcto para un delito en flagrancia como el presente.
Por su parte, el abogado del imputado, Iván Mochkofsky, habló con Canal C en el programa Córdoba Noticias donde respaldó a la familia. “La investigación sigue su curso; tienen que terminar de producir pruebas con relación a posibles testigos; hay que ver si quedan cámaras por visualizar. Y una vez que eso suceda hay que ver si se lo puede desvincular de la causa”, explicó. El letrado insistió en que Tejerina estaba en otro lugar al momento de los hechos y que para él, por su parálisis, “le es imposible materialmente” cometer el delito del que se lo acusa.
La explicación del ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros
El funcionario destacó que a Tejerina se lo mantuvo bajo custodia policial porque el joven “Se estaba yendo del lugar por sus propios medios con parte del dinero robado”. El acusado define que tenía ese dinero en su posesión porque levantó un fajo que dejaron caer los ladrones en su huida y buscaba entregárselo a la Policía.
Los investigadores no descartan que lo haya recibido por parte de la banda delictiva para ocultarlo, o bien, que pudo haber aprovechado que los delincuentes lo dejaron caer para quedárselo. Vale señalar que este último escenario también implicaría un delito, definido como defraudación atenuada.
Quinteros indicó que el accionar tanto de la Policía como de la Fiscalía “estuvo correcto”: “Estuve con la familia de Maxi el sábado en Jefatura de Policía, me preocupaba saber cómo había sido el accionar policial primero”, dijo y destacó que “El fiscal dejó en claro que el procedimiento había sido correcto. Fue una aprehensión civil por un guardia de seguridad. La Policía llega a partir de un llamado al 911. La Policía intentó y logró que no hubiese violencia por parte de la gente”.