Un insólito episodio ocurrió en una empresa cordobesa que fabrica snacks. Dos empleados ibas a ser despedidos y el Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación Córdoba (S.T.I.A.) los nombró delegados para que tengan protección gremial.
Gustavo Cipolletti, encargado de la empresa, dijo al Programa Cristina Sin Vueltas de Radio Rivadavia: “El Sindicato STIA hizo una elección fraudulenta, avisada 48 horas antes, y eligieron como candidatos a dos personas que íbamos a despedir por que no trabajaban”.
Esuchá la nota completa: