La mañana del 11 de septiembre de 2022 se trata de un día que Alejandro Frías, un joven de 23 años, jamás va a olvidar en su vida. Fue en aquella madrugada que Alejandro fue atacado por un grupo de muchachos en un after ubicado en Costanera y Zípoli, en Villa Siburu.
Todo comenzó por una discusión por un cigarrillo. No se sabe exactamente qué desató tal furia en aquel grupo de jóvenes, lo que no cabe duda es que todo se volvió violencia cuando empujaron a Alejandro contra el piso y lo atacaron a golpes. La golpiza y la herida fueron tan brutales que le causaron severas lesiones en la médula. Lamentablemente, Frías quedó parapléjico.
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Los imputados, que tienen entre 19 y 25 años y que debieron afrontar el juicio por “lesiones gravísimas en riña” son Benjamín Ceballos, Marcos Alan Barrionuevo, Santiago Nicolás Casquero, Lucas Guzmán Verón y un quinto joven que, en el momento del ataque, tenía 17 años y no se puede divulgar su identidad.
Cuatro jóvenes fueron hallados culpables de haber integrado la patota que atacó a Alejandro. El más chico tiene 17 años. Al ser menor, se lo declaró culpable, pero no se le impuso pena.
Pese a que la fiscalía a cargo de Marcelo Fenoll había pedido ampliar la imputación y la pena máxima para este delito es de ocho años de prisión, dos de ellos fueron condenados a dos años y medio mientras que los otros dos recibieron tres años. Un quinto joven fue absuelto.