A veces pensamos que las ‘celebrities’ viven en un mundo perfecto lejos de cualquier cosa negativa, y sin embargo, al final del día, son como todos los demás. Y aunque solemos verlas espectaculares sobre las alfombras rojas y ante los focos, hay quienes como Selena Gomez o Kate Winslet se muestran sin maquillaje, en contra de los retoques fotográficos.
Gestos como estos son realmente importantes en un momento en el que las aparencias en redes sociales son más fuertes que nunca porque sirven para demostrar que nadie es perfecto y lo más importante, que no pasa nada por o serlo.
Por eso, al ver las imágenes que Bella Hadid compartía con todos sus seguidores hace un par de semanas en las que mostraba sus avances con la enfermedad de Lyme, nos hacía sentir el doble de alegría. Por un lado, porque la modelo tranquilizaba a todos sus fans a los que les hacía ver que se encontraba bien y por otro lado, porque podíamos verla al natural, sin ningún tipo de filtro y dándole visibilidad a un padecimiento que sufren muchas personas en el mundo.
Pero la alegría no quedó ahí, Hadid dio la noticia que tanto tiempo llevábamos esperando: su vuelta al trabajo.
Con un par de imágenes y un video que parece ser el ‘making off’ de su nueva campaña para la firma de belleza Charlotte Tilbury, la modelo se mostraba radiante, con el pelo suelto y algo rizado, y con un vestido blanco en un tejido de vinilo que no puede gustarnos más. Un diseño de corte midi, maxi escote y con una gran abertura en la espalda, con el que demuestra que está de vuelta.
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