No todo es fútbol, el tenis, al igual que otros deportes, también se tornan así de emocionantes. Por la mañana fue todo de Podoroska, ahora Diego Schwartzman se jugó todo ante el austríaco Thiem en un partido sin respiro.
Peque ganó 7-6, 5-7, 6-7, 7-6 y 6-2. Luego de parecer que estaba todo perdido para Diego ganó el cuarto set y así forzó el quinto. Cambió rotundamente los planes del europeo que tenía el partido fácil. Schwartzman, luego de pasar a la semifinal, espera por Nadal o Sinner para un pasaje a la final.