En una nueva jornada del juicio contra ocho rugbiers acusados de asesinar a Fernando Báez Sosa, declararán en los Tribunales de Dolores 5 nuevos testigos, entre ellos los dos deportistas que fueron sobreseídos en la causa tras pasar algunos días presos, al entender la Justicia que no habían participado de la golpiza.
La decimoprimera jornada se retomó a las 9 de la mañana, y se esperan las palabras de Alejo Milanesi, Juan Pedro Guarino y de Tomás Colazo; este último es el rugbier “número 11” que en el momento de los hechos tenía 17 años y que si bien estuvo con el grupo esa fatídica durante y después de la pelea, no hay registros de que haya golpeado a Fernando.
Al arribar a los Tribunales cerca de las 8.30 horas, Guarino dijo a la prensa “Vengo a ayudar”. Un reportero preguntó “¿A tus amigos o a la Justicia?”, a lo que el testigo respondió “A la Justicia”. A eso le agregó la frase “Justicia por Fernando”.
Por último, también están citadas las madres de dos de los rugbiers, Rosalía Zárate (madre de Máximo Thomsen) y María Paula Cinalli (mamá de Blas Cinalli).
En esta audiencia clave, todos están obligados a decir la verdad. En el caso de que mientan, pueden caer en una imputación de falso testimonio y podrían terminar presos. El veredicto final se conocerá el próximo 31 de enero.
