La casa de Gran Hermano se vio sacudida por un giro inesperado cuando Agostina Spinelli respondió la llamada del teléfono rojo y recibió la devastadora noticia de su expulsión del reality de Telefe. La joven participante se vio obligada a abandonar la competencia, dejando a sus compañeros sumidos en la incertidumbre y la confusión.
Apenas transcurridos pocos meses desde el inicio de la nueva edición de Gran Hermano, las reglas de juego continúan sorprendiendo a los concursantes. El repicar del teléfono rojo desencadenó una oleada de emociones entre los participantes, quienes no lograban discernir si se trataba de una broma o de una realidad ineludible.
Santiago del Moro, conductor del programa, se comunicó con Agostina, quien se hallaba visiblemente conmovida, para anunciarle un beneficio singular: la oportunidad de permanecer en un espacio privado durante 24 horas, con la posibilidad de espiar a sus ex compañeros sin su conocimiento, antes de reintegrarse al programa.