Los padres de alumnos del Instituto Ramón García Martínez de Córdoba denunciaron que la escuela les aumentó la cuota para que los chicos puedan permanecer adentro de la escuela durante una hora y no les roben. El colegio les cobra $1.000 extra para que los estudiantes puedan permanecer dentro del edificio durante un lapso de tiempo entre las clases regulares y el inicio de la hora de Educación Física.
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“Hay muchos que no podemos venir a retirar a los chicos y en ese lapso tienen que almorzar y nos cobran para que los chicos estén ahí sin hacer nada, solo esperando que se les dé la clase de gimnasia”, remarcaron un grupo de madre en dialogo con El Doce y aseguraron que la zona es muy peligrosa para que los estudiantes deban esperar afuera de la institución y recordaron que días atrás un alumno fue baleado en un intento de asalto.