El experimentado central llegó a Belgrano con ansías de jugar y ponerse a las ordenes de Orfila. El jugador dio una conferencia donde por momentos predominó la emoción por ciertos recuerdos y anhelos del juego: entre ellos el ascenso o el pedido de su hijo, que no logró a contar.
“Me llenó de emoción volver a pisar el club, no te puede causar otra cosa. Fue una sensación que superó mis expectativas“, así definió su llegada a la institución, igual que al Gigante de Alberdi.
Su pasado en el club
El central prefirió no hablar del pasado, de esas “manchas” como él se refirió. “Las cosas pasaron, hoy el club es la prioridad. Hay que estar lo más unidos posibles“, afirmó.