La provincia de San Luis permanece cerrada como medida para contener los contagios de coronavirus. Sin embargo, esta decisión provoca importantes daños colaterales. Los bloqueos que inhabilitan el paso al territorio puntano perjudican a productores cordobeses.
Desde el inicio del confinamiento Córdoba y San Luis disputan el ingreso y el libre paso por la frontera que los divide. Sin embargo, aún no hay una resolución judicial que solucione el problema.
Trabajadores rurales de Río Cuarto denuncian los elevados costos y el tiempo de autorización que conlleva intentar ingresar a la provincia puntana. Relatan que se necesita un permiso que tarda alrededor de un mes, también pruebas de PCR negativas y estadía en un hotel para cumplir la cuarentena correspondiente. Todo esto, en promedio, cuesta 30.000 pesos.
