El domingo 12 de Noviembre alrededor de las 21.30 en la plaza Jerónimo del Barco de barrio Alto Alberdi, Lázaro Rivarola, fue golpeado hasta quedar inconsciente. Un total de 16 jóvenes lo empujaron, patearon y atacaron hasta que terminó en estado de coma. Fue el impacto de un ladrillo contra la cabeza del menor lo que termino por oficialmente poner en peligro su vida.
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Ahora, tras haber pasado por una intervención quirúrgica y haber ingresado al Hospital de Niños con lo que los médicos diagnosticaron un “daño cerebral era irreversible”, Lázaro vuelve a casa. Contra todo pronostico, luego de 40 días de internación y semanas en estado de coma, este mediodía el adolescente recibirá el alta medica.
“Está feliz y emocionado. Súper contento”, dijo Mariela, su mamá, en diálogo con Mitre Córdoba. Y agregó: “Es consciente de que estuvo al borde de la muerte”. Lázaro tiene algunas limitaciones en su parte motriz izquierda por lo que deberá hacer fisioterapia. “Ver el avance que ha tenido es increíble”, sostuvo emocionada Mariela.