La emblemáticas máquinas de coser Singer que marcaron toda una época, dejaron de ser producidas por la firma Macoser S.A, en la planta situada en la localidad de San Francisco.
Cabe destacar, que la fábrica era la última empresa nacional que estaba dedicada íntegramente al rubro y con una extensa trayectoria de 64 años. Sin embargo, distintos factores han provocado que la firma “no puede competir con productos importados” debido a la fuerte competencia comercial que proviene de “países muy poderosos de Oriente”.
Si bien la paralización de la producción se efectuó el 3 de diciembre, la firma seguirá siendo licenciataria en nuestro país de la clásica marca Singer.
El director ejecutivo de Macoser S.A., Roberto Macchieraldo manifestó que “este ha sido el final de la máquina para coser, nosotros ya habíamos previsto este momento hace 20 años”. Al mismo tiempo, señaló que “la única fábrica de máquinas para coser en el país que no cerró por problemas económicos fuimos nosotros”, pero subrayó que hoy “es imposible la inversión que debíamos realizar para que nuestro producto sea más competitivo”.
