En medio de un escenario político convulso, la Confederación General del Trabajo (CGT) ha decidido abstenerse de llevar a cabo manifestaciones esta noche, momento en el que se dará el discurso inaugural de Javier Milei en el Congreso. Una decisión que marca un quiebre en las tradicionales movilizaciones sindicales, y desde algunos sectores aseguran que esta postura refleja la falta de una estrategia unificada dentro de la central obrera. “No hay una estrategia común sobre ese tema”, expresó un directivo sindical.
El discurso de Milei ante los legisladores se presenta en un momento crucial para los sindicalistas, quienes anticipan fuertes críticas hacia ellos por su resistencia a la reforma laboral propuesta por los libertarios. La CGT, en particular, está en alerta y se espera que el presidente ataque nuevamente a “la casta” y a aquellos que se oponen al cambio, exacerbando aún más las tensiones entre este sector y el gobierno.
Mientras tanto, la CGT postergó reuniones y debate su estrategia ante el embate de Milei y su plan de lucha. Aunque se confirmó la intención de llevar a cabo un paro general, la dirigencia sindical optó por evaluar los tiempos antes de implementar nuevas medidas de fuerza. La decisión actual apunta a permitir que cada sindicato aborde sus propias luchas sectoriales contra las políticas de ajuste, mientras se espera una posible escalada de conflictividad hacia finales de marzo o abril.
