El Gobierno anunció un vademécum de 170 nuevos remedios gratuitos para afiliados del Pami y comenzó a implementar la receta digital.
Aquellos jubilados que deseen acceder a alguno de los principios activos del listado, deben asistir a su médico de Pami y ser diagnosticados por la enfermedad. El profesional podrá darle dos tipos de recetas: la digital, que consiste en un número que luego deberá entregar en la farmacia; o la electrónica que se imprime y se presenta también en las farmacias.
Ambos tipos de receta son válidos, la única diferencia es que uno se entrega en papel físico y el otro sólo se debe mostrar el número ente el farmacéutico.
“Esta medida cubre muchísimas patologías y afecciones. Tenemos disponibles son medicamentos habituales de los jubilados. Entonces habrá una normal dispensación de las medicinas”, dijo.
“Preguntan mucho porque tienen dudas. Han estado haciendo consultas pero seguro vendrán con sus recetas correctas”.
Al respecto, Eugenio Semino, defensor de la Tercera Edad, explicó que la receta digital “viene funcionando” y que estaba siendo utilizada por 1.300.000 afiliados y que se espera que se “extienda” al resto de los afiliados.
Por otra parte, estimó que la verdadera preocupación está en la “automedicación” de los argentinos.
“Nos duele algo y vamos a comprar medicamentos. A medida que crecemos, hacemos polifarmacias porque un día algo nos hizo bien y lo seguimos tomando. La atención primaria de Pami tiene que estar afilado porque hay mucha medicación que no es prolijamente recetada por el facultativo”.
Por último, indicó que este vademécum “no es una mejora del salario”.
“El salario es una cosa y la atención de la salud otra. Trabajamos para un envejecimiento saludable”.
