La suba de precios del 8,8% en el país y del 6,7% en Córdoba, ambas cifras informadas en la jornada del pasado martes, se ven reflejadas día a día en las góndolas y comercios de la ciudad. El aumento de la categoría de Alimentos y bebidas no alcohólicas se explica “principalmente por los incrementos en los precios medios de carnes y derivados; de alimentos y bebidas comprados y consumidos en restaurantes y bares; y de lácteos y huevos”, indican desde el área de estadísticas del Gobierno provincial.
En este contexto, las cámaras de Canal C recorrieron un comercio de la zona del Mercado de la ciudad para mostrar la realidad de los comercios y qué soluciones encuentran a la escalda inflacionaria para poder seguir ofreciendo productos de calidad y mantener la rentabilidad del negocio.
Kevin, comerciante, comentó que la llegada del invierno y el frío explica en gran medida la suba de precios. “El tomate, porque no hay sol y hace frío. El pimiento aumenta todos los años. El zapallito y la berenjena, porque no son de campo, sino de invernadero. El tomate grande vale $3.500 (por kilo); el chico $2.800. Cuando el año pasado valían $1.500 y $1.000 respectivamente. El zapallito está a $1.500 el kilogramo”. Estos productos escalaron cerca de un 40% su valor.
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Aunque el panorama no es brillante, sí hay productos que le esquivan a la inflación y logran mantenerse “en precio” y que pueden ofrecerse en promoción, como la papa a $1.500 los tres kilos. Kevin cuenta que también se propone la venta de bolsones con una importante variedad de verduras y frutas, que van desde los $3.900 hasta los $7.000 dependiendo de la cantidad de alimentos que traigan.
Otros productos como la lechuga, que en el verano aumentó cerca del 200%, ahora debió bajar su precio porque “no hay ventas”, indica el comerciante. “Si está muy caro, reemplazan productos”. Mirá el reportaje:
