La Justicia de Córdoba determinó en las últimas horas imputar a dos policías involucrados en el tiroteo del pasado viernes en la Galería Norte en el que falleció Raúl Oscar “el Gordo Otto” Cortéz. Los oficiales están acusados por “homicidio agravado con uso de arma de fuego, en calidad de sospechoso leve”.
Por otra parte, Agustín Cortéz, hijo del fallecido, se presentó ante la Justicia y fue imputado por orden de la fiscalía por el delito de “lesiones graves, agravadas”.
Este lunes, la familia de Cortéz se presentará ante la Justicia para solicitar participar como querellante en la causa. En diálogo con el sitio La Voz, el abogado Iván Sironi sostuvo: “Vamos a iniciar el proceso judicial que corresponde para un caso en el que la actuación policial fue, como mínimo, desmedida. Mercedes Ivana Heredia, la viuda de Raúl Cortéz, se presentará como querellante”.
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