Paulo Dybala, el delantero cordobés que pertenece al club italiano Juventus, junto a otros dos compañeros del equipo, fueron sorprendidos en una reunión que se desarrollaba por fuera del horario del toque de queda en ese país, donde el límite para salir es a las 20 horas.
Cerca de las 23.30, la Policía irrumpió en un domicilio donde había por lo menos diez personas, entre ellos Dybala, Weston McKennie y el brasileño Arthur Melo.
Fueron los vecinos de McKennie quienes dieron aviso a las autoridades, según informó el diario deportivo italiano Tuttosport. Los agentes determinaron que el encuentro social se desarrollaba en la casa de las colinas de Turín, donde estaban los futbolistas “con sus parejas y otros amigos”.
“Los funcionarios policiales multaron a los presentes por violar las regulaciones anti-Covid. Los tres jugadores de la Juventus también deberán enfrentar a una sanción del club, que primero escuchará la versión de los afectados” señalaron desde la institución de Turín.
Este jueves, tras conocerse a nivel mundial la noticia, Dybala publicó sus disculpas en sus redes sociales:
