Cada 3 de abril se festeja el Día Internacional del Arcoíris, una fecha que se usa para realzar y celebrar la fascinante ilusión óptica que durante siglos ha dado origen a mitos, leyendas, relatos bíblicos y explicaciones fantásticas sobre su significado.
¿Cómo se forman los arcoíris?
Los arcoíris son fenómenos ópticos y meteorológicos que resultan de la descomposición de la luz solar debido a la refracción: ocurre cuando los rayos solares atraviesan las gotas de la lluvia en un ángulo de 42 grados, que da como resultado un halo de luz multicolor. Debido a esto, es normal observar en el cielo un halo de luz con forma de arco y con vistosos colores. Los más comunes que podemos apreciar son el rojo, naranja, amarillo, verde, índigo, azul y violeta.
Curiosidades sobre los arcoíris
1- No se puede medir el principio ni el fin de un arcoíris o su ángulo, ya que esto depende en gran medida del lugar donde se encuentre la persona que observa este fenómeno.
2- No aparece en el cielo en horas del mediodía: Para que se manifieste este fenómeno, es necesario que se algunas condiciones como que exista la presencia de luz solar y que el día sea lluvioso, además, que el sol esté ubicado a menos de 42 grados por encima del horizonte.
3- Puede ser visible durante la noche: Aunque menos frecuente, los seres humanos pueden disfrutar de un fabuloso espectáculo de luces y color con plena luna llena sí los rayos solares chocan con las gotas de lluvia, entonces se podrá ver un arcoíris.
4- Se convirtió en el símbolo de la bandera LGBTQIA: Es utilizado como símbolo emblemático de algunos movimientos que buscan la dignidad y la tolerancia como es el caso de la Comunidad LGBT. La bandera porta seis colores y cada uno tiene un significado, cuya intención es hacer valer los derechos de los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transexuales dentro de la sociedad del siglo XX.
Las leyendas y mitos más comunes
Una de las más difundidas a lo largo de la historia es la leyenda irlandesa que cuenta que detrás de los arcoíris se esconden unos pequeños duendes. Se dice que estos duendes cuidan un tesoro, generalmente un balde lleno de monedas de oro, que llevan consigo y que solo es posible verlos en la unión del cielo y la tierra, justo cuando aparece un arcoíris. Allí y solo allí es el único momento en que estos duendes se muestran.
También hay una explicación para el catolicismo. Según el Antiguo Testamento, el arcoíris fue creado por Dios tras el Diluvio universal. En el relato bíblico, este aparecería como muestra de la voluntad divina y para recordar a los hombres la promesa hecha por el propio Dios a Noé de que jamás volvería a destruir la tierra con un diluvio.
Dentro de la mitología griega también se le dio una explicación al fenómeno: para ellos, el arcoíris era una diosa mensajera entre el cielo y la tierra llamada Iris, hija de Taumante y la oceánide Electra. Por otro lado, para los nórdicos, el arcoíris o «Bifröst» era un puente que unía Midgard (el mundo de los hombres) y Asgard (el mundo de los dioses) custodiado por el dios Heimdall.
