El partido del primer ministro británico, Boris Johnson, ganó cómodo las elecciones y obtuvo 364 bancas, 47 más que en el Parlamento saliente y garantizó la mayoría parlamentaria que necesita para concretar su principal promesa de campaña: abandonar la Unión Europea (UE) el 31 de enero próximo, con o sin acuerdo.
Detrás se ubicaron el Partido Laborista del líder Jeremy Corbyn, que obtuvo 203 bancas, 59 menos que en las últimas elecciones, y el independentista Partido Nacionalista Escocés (SNP), con 48 asientos, 13 más que en la cámara saliente.
Se trata de la mayor victoria conservadora desde la de Margaret Thatcher en 1987 -el oficialismo ganó 50 bancas- y la peor derrota laborista desde la de Clement Attlee, en 1935 -la principal fuerza opositora perdió 71 bancas.
Aún antes de conocerse los primeros resultados oficiales, Johnson tuiteó en tono celebratorio: “Gracias a todos los que, a lo largo del país, votaron, trabajaron como voluntarios y se candidatearon. Vivimos en la mejor democracia del mundo”.
Thank you to everyone across our great country who voted, who volunteered, who stood as candidates. We live in the greatest democracy in the world. pic.twitter.com/1MuEMXqWHq
— Boris Johnson (@BorisJohnson) December 12, 2019