En medio de la preocupación por el aumento exponencial de casos de dengue en el país, con 17 provincias en alerta sanitaria, se conoció un dato revelador sobre dos síntomas que son cada vez más frecuentes en los pacientes con esta enfermedad. Un reciente estudio sugiere que la astenia, la fatiga y otros síntomas aparentemente menores podrían ser señales importantes en el diagnóstico de esta enfermedad.
La investigación reveló que los pacientes no solo pueden presentar síntomas como dolores articulares y cefalea, sino también experimentar cambios significativos en su salud mental, como ansiedad y depresión. Según dicho estudio, tras la fase aguda del dengue, la prevalencia de sintomatología depresiva significativa se mantiene en un rango del 5 al 15%.
Este hallazgo resaltó la importancia de considerar la salud mental en el diagnóstico y tratamiento del dengue. A menudo, los síntomas neuropsiquiátricos pueden ser pasados por alto o malinterpretados como una reacción psicológica al malestar físico. Sin embargo, la persistencia de estos síntomas incluso después de la fase aguda de la enfermedad sugiere una conexión más profunda con la enfermedad, la cual debe ser tenida en cuenta para su posterior tratamiento.
En esta línea, los investigadores instan a una mayor conciencia sobre la posible intersección entre el dengue y la salud mental, especialmente en poblaciones vulnerables. Además, abogaron por un seguimiento a largo plazo de los pacientes para detectar y abordar posibles complicaciones psiquiátricas.
