Una investigación que ya tiene largo tiempo se desarrolla en torno a reiteradas estafas contra la Administración Provincial del Seguro de Salud (Apross). En esta ocasión las nuevas pistas condujeron a tres nuevos allanamientos en Córdoba, con cuatro detenciones y la reafirmación de una estafa aún en curso, que por el momento escala a $ 4.800.000.
Las sospechas recayeron en una banda que obtenía insulina a partir de documentación falsificada. La mecánica habría consistido en la confección de recetas falsas. Luego de haberse detectado la irregularidad en una farmacia, la Policía allanó este viernes domicilios de barrio San Vicente, barrio Jardín y de la localidad de San Antonio de Arredondo. Los detenidos están acusados de participar en “una maniobra delictiva que consistía en la confección de recetas con datos falsificados, incluyendo los sellos de médicos y sus firmas”.
Se sospecha de alguna complicidad interna, ya que para efectuar estos retiros, los ahora detenido obtenían primero los datos de los afiliados y los empadronaban como insulino-dependientes sin que estos lo supieran.
A pesar de los grandes avances en la investigación se cree que solo se trataría de los primeros resultados y no descartan que el fraude sea por un monto mucho más elevado del calculado hasta ahora.
Los operativos de este viernes formaron parte de una pesquisa que lleva un año de duración y que fue solicitada por miembros del directorio de la obra social, en particular por su presidente Nicolas Carvajal y el vocal Sebastián García Petrini.
