Las estadísticas siempre muestran una parte de la realidad. Pero muchas veces es lo único que tenemos a mano para explicarla. Al mismo tiempo son “indicadores”, es decir, nos indican algo de una determinada realidad. A partir de esa indicación, podemos seguir profundizando en otros datos para lograr una mejor explicación de lo que sucede.
Decidimos monitorear algunos números sobre COVID-19, sin involucrarnos en las teorías que determinan posiciones en el debate, de manera tal que podamos mirar sólo el comportamiento de los números y compartirlo en redes.
Así fue que pasamos desde la simple curva de infectados, incluyendo luego la tasa de letalidad, los muertos por millón de habitantes, los test por millón de habitantes, y por supuesto, también había que considerar la densidad poblacional.
Desde el inicio de la pandemia los desafíos se concentraron en evitar “el pico” de infectados. Todos los países buscaban “aplanar” la curva.
Los primeros casos en Argentina se vieron al inicio de Marzo. Y el día 20 de ese mes el Gobierno argentino implementó la medida de Aislamiento Social Obligatorio en todo el país. Ese día, Brasil y Chile tenían 3,4 veces más infectados que Argentina (ver gráfico). Hoy, Brasil tiene 15 veces más infectados que Argentina. Y Chile mantiene la diferencia (3,6).
Mientras en Argentina la curva se mantenía plana, los tópicos del debate teórico giraban en torno a que: “el pico ya viene”, “no se hacen testeos”, “el aislamiento sirve”.
En nuestra publicación del 7 de abril, Argentina tenía 261 test por millón de habitantes y 1.715 infectados. El 24 de Abril tenemos 992 testeos por millón de habitantes y 3.425 infectados. Es decir que los testeos se cuadruplicaron, mientras que los infectados se duplicaron.
Está claro que el debate no se termina en el hecho de si la curva sigue aplanada o si el pico llegará mañana. Muchas son las variables que nos habilitan al debate; la crisis sanitaria conlleva una crisis económica, social y política también. Hasta ahora, si nos remitimos al desafío original –evitar el pico-, lo que sí podemos afirmar es que el aislamiento sirve.
