Este martes se estima que empiece a llegar a Siria y Turquía la ayuda argentina a través de la Agencia Argentina de Cooperación Internacional y Asistencia Humanitaria – Cascos Blancos (Aciah). El organismo brindará asistencia a los afectados por el terremoto de magnitud 7,8 con epicentro en ambos países, dejando por el momento más de 5.000 muertos y miles de heridos.
El ofrecimiento argentino comprende atención socio-sanitaria, contención psico-social post traumática y personal logístico “con experiencia tanto en manejo de bodegas para donaciones como para el armado de casas Acnur (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados) y gestión de campamentos de personas afectadas y albergues”, detallaron mediante un comunicado.
Además, se prevé la provisión de pastillas potabilizadoras de agua y desinfectantes y manejo y capacitación de uso para las y los afectados. Cabe destacar que las tareas de rescate y asistencia se vieron dramáticamente complicados por las temperaturas bajo cero que se registraron en los últimos días.
Según precisaron, en Turquía ya se contabilizan 3.419 fallecidos y 20.543 heridos, mientras que en Siria se supo de 1.602 muertos y 3.640 heridos. Los edificios caídos por el movimiento telúrico son más de 8.000, por lo que la crisis está en niveles drásticos: los centros asistenciales y hospitales no dan abasto con la cantidad de personas que buscan ayuda.
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Se espera que la ayuda internacional a Turquía empiece a llegar hoy con los primeros equipos de socorristas de lugares como Francia o Qatar, en tanto que 45 países se dispusieron en el mismo sentido, según el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
En cambio, el llamado del Gobierno de Siria recibió por ahora respuesta de Moscú, su aliado, que prometió equipos de socorro “en las próximas horas”, además de 300 militares rusos que ya se encuentran en el lugar para ayudar en el rescate, según consignó la agencia de noticias AFP.
Al respecto, la ONU insistió en que la ayuda debe llegar a toda la población siria, incluida la parte que no está bajo control de Damasco.
En base a los mapas de la zona afectada, una responsable de la OMS, Adelheid Marschang, indicó que “23 millones de personas están expuestas” a las consecuencias del terremoto, “incluyendo cinco millones de personas vulnerables”.
