El intendente de Córdoba, Martín Llaryora, indicó a la Secretaría de Movilidad Urbana de la ciudad que se incrementen las frecuencias del transporte urbano para que todos los pasajeros viajen sentados.
La medida apunta a que los pasajeros del transporte urbano puedan viajar respetando la distancia física entre las personas, tal como lo exigen los médicos y especialistas.
Además, en el área de transporte, se resolvió que queda terminantemente prohibido que los taxis y remises lleven pasajeros en el asiento del acompañante del conductor. También, solicitan que circulen con las ventanillas bajas.