La resolución de sobreseer a la vicepresidenta Cristina Kirchner en la causa conocida como “La ruta del dinero K” llega después de que tanto el fiscal como las querellas de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Unidad de Información Financiera (UIF) solicitaron la desvinculación de la vicepresidenta. Con esta decisión, la acusación queda archivada definitivamente, poniendo fin a un expediente que se inició en 2013 y era el único de relevancia que la vicepresidenta tenía en investigación.
El caso se originó a partir del testimonio de Leonardo Fariña, quien declaró como arrepentido y afirmó que Lázaro Báez, empresario vinculado al lavado de dinero, le había mencionado que Cristina Kirchner le había preguntado si estaba sacando dinero al exterior. Sin embargo, el fiscal Marijuan concluyó que las pruebas presentadas no eran suficientes para vincular a la vicepresidenta con el lavado de dinero y destacó que la Cámara de Casación no consideró la obra pública como delito precedente del lavado de Báez, lo que desvinculó a Cristina Kirchner.
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Tras el dictamen del fiscal, el juez Casanello solicitó la opinión de la UIF y la AFIP, ambas coincidieron con el pedido de sobreseimiento de la vicepresidenta. Además, rechazó la solicitud de la asociación civil Bases Republicanas de ser querellante en el caso, argumentando que había demorado demasiado en presentarse y que su petición carecía de fundamento. Con esta resolución, Cristina Kirchner queda desvinculada de la causa, aunque continúan otras investigaciones en las que está involucrada junto a Lázaro Báez, como el caso de las irregularidades en las obras públicas y el de las empresas Los Sauces y Hotesur.