Durante la mañana de este jueves se confirmó que se acabó el oxígeno suministrado en el sumergible que desapareció una hora y media después de su partida el domingo pasado. La cantidad de horas establecidas para sobrevivir en la nave eran de 96 horas y se acabó a las 8:08 de la mañana (hora argentina).
Los especialistas que venían siguiendo el tema analizan la posibilidad de cancela la búsqueda ya que asegura que nadie sobrevivió. Hasta ahora cinco barcos, a los que estaba previsto que se sumasen otros cinco, dotados con sonares y equipos de alta tecnología, estuvieron peinando una superficie de unos 20.000 kilómetros cuadrados de isla canadiense de Terranova que es de donde más ceca se encontraba, aproximadamente el tamaño de El Salvador, y a una profundidad de casi cuatro kilómetros, mientras desde aviones buscan de cualquier rastro del sumergible.
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Los pasajeros que pagaron 250.000 dólares por el viaje eran: el millonario británico Hamish Harding, presidente de la compañía Action Aviation; el paquistaní Shahzada Dawood, vicepresidente de Engro, y su hijo Suleman; el experto buceador francés Paul-Henri Nargeolet; y Stockton Rush, director general de OceanGate Expeditions, la compañía que opera el sumergible.
Este miércoles se dispararon algunas esperanzas luego de haber detectado ruidos bajo el agua por parte de aviones P-3 canadienses, pero los rescatistas que enviaron al lugar no encontraron nada. “No sabemos qué son los ruidos”, el capitán Jamie Frederick a la prensa (Agencia AFP). Las familias de los desaparecidos reclaman su búsqueda.
