En un giro inesperado, el destacado actor argentino Pablo Alarcón fue visto realizando presentaciones a la gorra en las plazas de Buenos Aires. Esta iniciativa sorprendente surgió como resultado de las dificultades económicas que enfrenta el actor, quien compartió abiertamente sus razones en una entrevista reciente.
A sus 76 años y sin un trabajo estable en teatro ni televisión, Alarcón decidió adaptarse y conectarse con el público de una manera nueva y directa. Bajo el nombre de “El Discurso de la Servidumbre Voluntaria” de Augusto Gavilán, el actor ofrece funciones de 15 minutos en las que transmite su pasión por la actuación y la expresión artística.
Alarcón explicó: “Esto era algo que me faltaba en mi vida hacer. No tengo trabajo en este momento en el teatro y me pareció una muy buena oportunidad porque tengo tiempo y además yo no necesito trabajar a esta altura de mi vida. Necesito ganar guita para vivir. Está jodida la situación de los actores porque no hay trabajo. De nosotros, de los barrenderos, de los cocineros, de los periodistas, de todos. Está jodido el país. Ha llegado la miseria a un límite total. No se asombren de que yo esté trabajando a la gorra. Asómbrense de lo mal que está el país”.
A pesar de su reconocimiento y trayectoria en la industria del entretenimiento, Alarcón ha dejado en claro que la difícil situación económica que atraviesa es compartida por muchos en su país. El actor enfatizó la importancia de enfrentar estas realidades y encontrar formas creativas de adaptarse.
Alarcón también mencionó su espectáculo llamado “El Cocinero está Frito”, que ideó durante la pandemia. Este espectáculo, que combina música, juegos y cocina a domicilio, ofrece a Alarcón la oportunidad de continuar compartiendo su talento en un formato innovador y acogedor.
En medio de su presentación callejera, Alarcón no dudó en expresar sus opiniones sobre la situación política y económica de Argentina. El actor recitó fragmentos de su obra y compartió sus pensamientos sobre la corrupción y la falta de oportunidades para muchos ciudadanos. Además, anunció sus planes de llevar su espectáculo a lugares emblemáticos de la ciudad para transmitir su mensaje y expresar su descontento.
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