El Padre Ángel Rossi fue designado por el Papa Francisco como el nuevo Arzobispo de Córdoba. A minutos de conocerse la noticia de la designación, junto a Monseñor Carlos José Ñáñez a quien reemplazará en su ministerio, compartieron sus impresiones con los oyentes de Radio María Argentina. El viernes 17 de diciembre a las 19hs será la ordenación episcopal, en el atrio de la Catedral de Córdoba.
“La verdad que uno queda desconcertado. La verdad con mucho miedo por la propia fragilidad y a la vez con confianza por el cariño de la gente y de los curas, ojalá podamos acompañarnos unos a otros, ese es el deseo que tengo” dijo el Padre Ángel ante la pregunta del Padre Javier Soteras sobre cómo había recibido la noticia.
“No somos mayordomos ni amos, somos humildes servidores y compañeros de camino, en este espíritu sinodal que tanto ha puesto el Papa en el corazón de la Iglesia. Sinodar significa caminar con, y creo que eso es el sentido de la misión, caminar con mis hermanos en el sacerdocio y caminar con nuestro pueblo que ciertamente son maestros en el caminar y nos enseñan tanto” agregó, dejando entrever su modo con el que será pastor de la Arquidiócesis.
Por su parte, Monseñor Carlos Ñáñez, quien presentó su renuncia en agosto pasado al haber cumplido 75 años, comentó que “la noticia ha significado una gran alegría. Tengo un gran aprecio por el padre Ángel, por su persona, por su ministerio, por su trayectoria en córdoba (…) la elección del padre Ángel lo veo como una providencia de Dios para nuestra iglesia Arquidiocesana”.
Con su picardía característica, “el Padre Ángel”, como lo conocen sus feligreses, comentó una coincidencia que lo une al actual pastor de la Arquidiócesis: “Providencialmente la mamá de Monseñor Carlos fue compañera de colegio de mi madre” lo que desató la sorpresa del Padre Javier Soteras quien preguntó entre risas si se habrán puesto deacuerdo en el cielo. “Seguro que sí” respondió Monseñor Carlos Ñañez, y por su parte Rossi agregó con humor: “Una habrá estado agradeciendo y la otra pidiendo auxilio, una descansando y la otra suplicando conociendo la debilidad del hijo”.
Fuente: Radio María
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