La localidad de Bulnes, en el departamento Río Cuarto, fue epicentro de una intensa tormenta durante la noche del sábado. El fenómeno meteorológico sorprendió a los vecinos con una pedrea de gran calibre, cuyas piedras fueron comparadas en tamaño con un huevo.
Las precipitaciones cubrieron calles y patios en pocos minutos, tras una jornada de calor agobiante en la provincia. El jefe comunal, Rubén Máspero, confirmó que el granizo fue “bastante importante”, aunque no se registraron daños graves ni personas lesionadas.
En el pueblo se produjeron cortes en el suministro eléctrico, pero la ausencia de ráfagas potentes evitó mayores perjuicios. El temporal también impactó otras zonas del departamento Río Cuarto, en un contexto de inestabilidad climática que se mantiene en Córdoba.a de Bulnes


































