Pasaron 23 años desde el estreno de la primera edición de Gran Hermano y, a pesar de las varias ediciones que cosecha el programa, el reality continúa siendo el preferido por los argentinos. En diálogo con Córdoba a la Siesta, Tamara Paganini habló sobre su estadía en la casa y cómo cambió a lo largo del tiempo.
"Gran Hermano es un experimento maquiavélico, pero es una experiencia increíble. Lo que uno lamenta es el después, cómo la gente te odia y te ama, y la mitad de las veces son violentas", relató la exjugadora. Y agregó: "A mí me han escupido y tirado de los pelos. No podía caminar por la calle".
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Por otra parte, hizo la comparación desde la edición del 2001 y la actual: "No se puede comparar, son otras épocas. Cuando yo estaba ahí, pasaron cosas que hoy estarían súper censuradas". Sin embargo, exclamó: "Nosotros eramos demasiado buenos, y en éste hay más violencia pero son menos hipócritas".
"Creo que el límite en este Gran Hermano va a ser la violencia física. Me parece bien que no se limiten en verbalizar lo que sienten, como el caso de Furia. No me importa que grite mientras diga la verdad", señaló Paganini.
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