La noche de domingo se convirtió en un campo de batalla mediático cuando Tamara Báez, ex pareja de L-Gante y madre de su hija Jamaica, irrumpió con duras acusaciones hacia Wanda Nara.
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En un comentario publicado en las redes sociales, Báez cuestionó frontalmente las declaraciones de la empresaria sobre su relación con el cantante de cumbia 420, y lo hizo de una forma categórica: “Yo les confirmo que ella se metió con el papá de mi hija cuando estábamos juntos. Hablé con Kennys por teléfono y me lo negaba. En fin… siempre tuve la razón”, escribió Tamara, lanzando un dardo directo a Wanda y poniendo en duda la versión oficial sobre el romance de la empresaria con L-Gante.
La revelación fue explosiva. Tamara se refirió a la relación de Wanda y L-Gante como algo que no comenzó en un “terreno limpio”, sino que, según su versión, se originó mientras ella aún estaba en pareja con el cantante de cumbia. Esta acusación, lanzada en un comentario durante una transmisión en vivo de Yanina Latorre, tomó por sorpresa a los seguidores del escándalo. La frase “siempre tuve la razón” añadió un toque de vindicación a sus palabras, como si la ex pareja de L-Gante estuviera cerrando un capítulo doloroso de sospechas y decepciones.
La aparición de Tamara en las redes no fue una casualidad. Ese mismo domingo, Wanda Nara había estado frente a Susana Giménez, hablando sobre su vida personal y profesional. En medio de la entrevista, la empresaria había abordado temas sensibles, como el escándalo de infidelidad protagonizado por su ex marido Mauro Icardi con la China Suárez, y también se refirió a su relación con L-Gante.
Para sorpresa de muchos, en un tono relajado y divertido, Wanda compartió cómo había conocido al cantante, con quien, según sus palabras, encontró una conexión que la hizo sentir “como la Wanda del barrio”, a pesar de la diferencia de edad. “Cuando me preguntan qué le vi, yo digo: ‘La esencia mía’. Volví a ver mi esencia, me recuerda a la Wanda de barrio. Me gusta estar con alguien que tenga esos valores”, explicó la empresaria.
Sin embargo, lo que parecía un relato sobre la reconstrucción de su vida amorosa fue rápidamente empañado por la intervención de Tamara Báez. La ex pareja de L-Gante no solo cuestionó la relación actual de la empresaria con el cantante, sino que también recordó el conflicto que la había enfrentado a ella durante su relación con el músico. Báez hizo referencia a una conversación que habría tenido con el asistente de Wanda, Kennys Palacios, quien supuestamente le habría negado las sospechas que ella tenía sobre un posible romance entre Nara y L-Gante. Según Tamara, su intuición no solo estaba bien fundada, sino que su acusación ahora encontraba eco en los hechos.
La acusación de Tamara Báez no se limitó a señalar a Wanda como la responsable de su ruptura con L-Gante. También reflejó un cuestionamiento más profundo sobre la coherencia de la empresaria en sus declaraciones sobre la fidelidad. Durante la entrevista con Susana, Wanda Nara había hablado con amargura sobre el dolor de haber descubierto la infidelidad de Icardi con la China Suárez, un escarceo que puso en jaque su matrimonio y su vida familiar. “Me dolió enterarme del hotel que eligieron para estar”, confesó, visiblemente afectada por el recuerdo. Pero para Tamara, estas declaraciones resonaron con un tono de contradicción.
Más allá de los detalles de la ruptura con L-Gante, lo que también pesaba en las palabras de Tamara Báez era su rol como madre de Jamaica, la hija que tuvo con el cantante. En varios momentos de su intervención en redes, Tamara ha hablado abiertamente de las dificultades de criar a su hija mientras enfrenta la exposición mediática y el escrutinio público sobre su vida privada.
La relación entre Wanda Nara y L-Gante ha sido, desde el comienzo, un tema de especulación, comentarios y titulares. En su entrevista con Susana Giménez, la empresaria trató de dar una imagen de fortaleza y amor genuino con el cantante, asegurando que se sentía feliz con él, a pesar de la diferencia de edad y el impacto mediático que conlleva su relación. “Nosotros no tenemos un proyecto de vida juntos, pero estamos disfrutando el presente”, declaró Wanda, buscando restarle presión a una historia de amor que ha generado muchas críticas.
Sin embargo, las palabras de Tamara Báez, acusando a Wanda de haber jugado un papel clave en la ruptura de su relación con L-Gante, suman un nuevo capítulo a esta historia que parece no tener fin. Aunque la acusación de Tamara no ha sido confirmada con pruebas públicas, sus palabras han generado un nuevo debate en redes sociales y programas de espectáculos. La figura de Wanda, que ya estaba envuelta en diversas controversias, se encuentra ahora en el centro de una guerra de versiones que sigue alimentando los titulares.