El Banco Central de la República Argentina (BCRA) determinó que todos los cajeros automáticos del país deberán contar con un lector de huellas digitales para añadir una opción de operación para los usuarios, quienes contarán con este dato biométrico único para realizar transacciones.
Es importante destacar que esta implementación no desplaza al uso de tarjeta convencional, ya que la modalidad será optativa y la posibilidad de operar los cajeros con tarjetas y códigos de seguridad seguirá vigente.
La normativa alcanza tanto a los cajeros ya instalados como a los que se vayan a habilitar en el futuro. Apunta, principalmente, a facilitar la relación entre el usuario y la máquina, y también facilitar los pagos de beneficios sociales a personas que no poseen tarjeta de débito.
El comunicado de la entidad indica además que “El uso, por su simplificación, también favorece el acceso a los cajeros automáticos por parte de los grupos de la sociedad con mayor grado de vulnerabilidad, facilitando su inclusión financiera en niveles de calidad”.
El parte indica que la utilización de la huella dactilar “es posible porque Argentina cuenta con una base de datos biométricos centralizada y es administrada por el Registro Nacional de las Personas (Renaper)”. Así, “la validación de la identidad con huella dactilar contará con un doble factor de seguridad ya que también será necesario identificarse con el número de DNI o con una clave personal (PIN)”.
La nueva normativa contempla que las redes de cajeros automáticos tengan en cuenta en su plan de adecuación los mecanismos para lograr la interoperabilidad con este sistema de identificación para que las personas usuarias puedan acceder a sus cuentas en cualquier banco.
El BCRA estableció un cronograma hasta alcanzar la interoperabilidad y su utilización en el total de los cajeros a fin de 2022.
- Deberá estar operativa en los cajeros automáticos que ya cuentan con lectores biométricos, antes del 30 de junio de 2021.
- La interoperabilidad para la identificación de las personas usuarias deberá estar operativa a partir del 31 de enero de 2022.
El porcentaje de cajeros con lectores biométricos deberá alcanzar:
• 35% al 31 de diciembre de 2021
• 60% al 30 de junio de 2022
• 100% al 31 de diciembre de 2022
