El concejal Juan Balastegui (UCR) impulsó nuevamente un proyecto para instalar sensores de humo, gas y monóxido de carbono en los edificios de la ciudad de Córdoba. Esta propuesta ya había sido presentada en el mes de abril, luego del trágico incendio en Nueva Córdoba donde murieron dos estudiantes jujeños.
Tras el incidente similar del martes 9 de julio a la madrugada en un edificio en la calle Caseros del centro de la ciudad, en el que murieron cuatro jóvenes, el proyecto se puso en mesa nuevamente y tomó relevancia.
Nuevo impulso del proyecto tras el incendio
“El proyecto consiste básicamente en modificar el Código de Edificación incorporando la obligatoriedad de instalar sensores de monóxido, de humo y de gas en los departamentos para adelante, para todos los que están por construirse”, explicó Balastegui.
A su vez, en diálogo con radio Mitre indicó que se está “buscando también la retroactividad para atrás pidiendo que en comisión se cite a la Cámara de Inquilinos y a la Cámara de Propietarios para ver el proceso de la aplicación de esta medida”.
El concejal también aseguró que los sensores “son de muy bajo costo” y que hay variedad, dependiendo la marca, entre los 15 mil y 30 mil pesos. Además, según precisó Balastegui, “son de muy fácil aplicación” y que no hay necesidad “de hacer grandes modificaciones”. “Se instala con una cinta doble faz o en algunos casos se enchufa nomás”, detalló.
“Si esto hubiera estado vigente, es una locura que en Córdoba no esté, se podría haber evitado todas estas muertes”, señaló.
Condiciones edilicias
Respecto a las condiciones de los edificios de la ciudad y la tecnología con la que fueron construidas y se mantiene, el concejal afirma que “se hicieron en otra época donde había otras exigencias, donde la tecnología de la construcción era otra” por lo que ahora que ahora hay que tomar otras medidas.
“La Municipalidad sabe que en algunos casos la colocación de escaleras externas, aisladas, se hace imposible por la forma o estructura del edificio. Pero los tiene que peritar, que revisar y buscar alternativas. En otros países existen salidas verticales con escaleras desplegables que no son de alto costo y se pueden instalar fácilmente en el exterior de algunos edificios”, insistió Balastegui.
“El caso de los chicos de Nueva Córdoba si hubieran tenido una escalera para escapar otro hubiera sido el resultado”, ejemplificó el edil.
Finalmente consideró que los sensores podrían instalarse no solamente en edificios y propiedad horizontal sino también en casas particulares. “Es una inversión de seguridad y deberían hacerlo”, concluyó.
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