Situaciones muy tensas se viven en Ecuador en estos días: múltiples protestas, manifestantes detenidos y represión policial son solo algunos de los hechos que se registraron en la ciudad de Quito. Los violentos momentos fueron tales que, este lunes por la noche, el presidente Lenín Morenos decidió trasladar la sede del Gobierno a Guayaquil y, este martes, decretar un toque de queda nocturno.
La última de las medidas regirá durante 30 días para todo el país y se hizo oficial luego de que un grupo de manifestantes ingresaran por la fuerza al Parlamento. El objetivo de la medida es evitar la concentración de manifestantes en los alrededores de los poderes ejecutivo, legislativo y judicial.
En Quito recibí el reporte de que las marchas se desarrollan con normalidad. Hermanos indígenas, me alegra que hayan separado de sus manifestaciones pacíficas, a los elementos perniciosos. Y qué grato es anunciar que los diálogos ya empiezan a dar frutos.#EcuadorPaísdePaz pic.twitter.com/D6NhA0XBfu
— Lenín Moreno (@Lenin) October 9, 2019
Vale agregar que las revueltas, a las que también se sumaron indígenas y campesinos, se produjeron luego de que el gobierno ecuatoriano desarrollara un “paquetazo” económico. Se trata de una serie de medidas de ajuste que incluyen la quita de subsidios a los combustibles y en consecuencia, un incremento fuerte en el precio.
Desde las Fuerzas Armadas aseguraron que “regirá en todo el territorio nacional la restricción de movilidad en áreas sensibles y de importancia estratégica” entre las ocho de la noche y las cinco de la mañana. Además, quienes incumplan la orden “serán inmediatamente detenidos”.
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