A medida que Donald Trump avanza en la formación de su gabinete tras su victoria en las elecciones presidenciales, se ha filtrado que el presidente electo está considerando seriamente al senador republicano Marco Rubio para el cargo de secretario de Estado.
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Aunque la decisión aún no está confirmada, varias fuentes cercanas a Trump han indicado que Rubio es uno de los principales candidatos para ocupar este puesto clave en la diplomacia estadounidense. Este movimiento no es del todo inesperado, ya que Trump había considerado a Rubio como su compañero de fórmula para la vicepresidencia en las elecciones de 2016.
El historial entre Trump y Rubio no fue siempre amistoso. Durante las primarias republicanas de 2016, ambos políticos protagonizaron intercambios de duras críticas. Rubio, en ese momento, acusó a Trump de ser un “estafador” y lo calificó como “la persona más vulgar que ha aspirado a la presidencia”. Trump, por su parte, se refirió a Rubio como “Little Marco” y criticó su presencia en los medios. Sin embargo, con el paso de los años, la relación entre ambos ha mejorado considerablemente, y Rubio ha ganado relevancia dentro del círculo cercano de Trump, sobre todo en cuestiones de política exterior.
En este contexto, Rubio ha sido visto como un candidato fuerte para el Departamento de Estado, un cargo crucial para la diplomacia de Estados Unidos, y que implica la responsabilidad de manejar las relaciones internacionales y las políticas exteriores de la nación. En este sentido, el senador por Florida ha demostrado ser un ferviente defensor de una postura firme contra regímenes autoritarios como los de Cuba, Venezuela y China, lo que lo convierte en una opción lógica para Trump, quien también ha adoptado una política exterior más confrontativa hacia estos países.
Rubio es conocido por su postura firme en política exterior y por su defensa de los intereses de Estados Unidos en el mundo. En particular, el senador ha sido un crítico abierto del régimen chino, al que considera una amenaza para los intereses estadounidenses. En el Congreso, ha promovido diversas sanciones contra China por sus violaciones de derechos humanos, especialmente por su trato hacia la minoría uigur. Además, Rubio ha sido un defensor de la defensa de Taiwán y ha expresado su apoyo a la isla frente a las crecientes amenazas de China.
Otro aspecto que ha sido destacado por los analistas es el conocimiento de Rubio sobre América Latina, dada su herencia cubana y su dominio del español. Esto lo posiciona como una figura clave para las relaciones con los países de la región. Durante su tiempo en el Senado, Rubio ha jugado un papel fundamental en la formulación de políticas hacia América Latina, especialmente en lo que respecta a las sanciones contra los gobiernos de izquierda en la región y su defensa de los derechos humanos.
El senador de Florida Rick Scott, un aliado cercano de Trump, expresó su apoyo a la posible designación de Rubio como secretario de Estado, resaltando sus cualidades para liderar la diplomacia estadounidense. En un mensaje publicado en la red social X (anteriormente conocida como Twitter), Scott dijo: “Marco Rubio restaurará el liderazgo estadounidense en el mundo, especialmente en América Latina, representando a Estados Unidos con dignidad y valentía”.
La designación de Rubio también encajaría con los planes de Trump de consolidar una postura internacional más aislacionista, evitando intervenciones militares a gran escala, como las que caracterizaron las administraciones previas. Durante la campaña de 2016, Trump sugirió que Taiwán debería pagar por su protección, una declaración que fue criticada por muchos, pero que Rubio, en cambio, respaldó y se mostró dispuesto a apoyar la defensa de Taiwán frente a la agresión de China.
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El nombramiento de Rubio podría tener implicaciones clave para la política exterior de Estados Unidos, particularmente en relación con las tensas relaciones con China y la guerra en Ucrania. Aunque Trump ha expresado su deseo de terminar los conflictos en Ucrania y el Medio Oriente, la posibilidad de que tome decisiones unilaterales sobre estos asuntos ha generado preocupaciones, especialmente entre los aliados europeos y las autoridades ucranianas.
El equipo de Trump también está considerando a Michael Waltz, un veterano del ejército y miembro del Congreso de Florida, para el puesto de asesor de seguridad nacional. Waltz ha sido un crítico feroz de las políticas de China y ha advertido sobre los riesgos que representa el crecimiento militar de ese país para la seguridad de Estados Unidos.
Marco Rubio nació en Miami, Florida, en 1971, de padres cubanos que emigraron a Estados Unidos en busca de una vida mejor. En 1993, se graduó en ciencias políticas por la Universidad de Florida y, en 2010, fue elegido senador por el estado de Florida. Desde su llegada al Senado, Rubio ha sido una figura destacada en la política republicana, especialmente en temas de seguridad nacional y relaciones exteriores.
Aunque algunos sectores conservadores han cuestionado su postura sobre inmigración, especialmente durante su intento de obtener la nominación presidencial republicana en 2016, Rubio ha mantenido una carrera sólida en el Senado, donde ha demostrado una notable capacidad para influir en las políticas hacia América Latina y en la formulación de estrategias de seguridad nacional.
A principios de año, Milei se juntaba con Marco Rubio, candidato fuerte para Secretario de Estado de USA. Siempre 4 jugadas adelante el presidente. pic.twitter.com/1LkSvOqk3c
— Santiago Oría (@Santiago_Oria) November 12, 2024
