A horas de conocerse que tanto Lucas Gómez como Javier Alarcón, los dos efectivos de la Policía de Córdoba acusados de asesinar al adolescente Blas Correas, tienen antecedentes penales, se conoció la pericia balística.
Así lo confirmó la Fiscalía, constatando que la bala fatal que terminó con la vida de Blas salió del arma que portaba Lucas Gómez. Actualmente, el efectivo de la fuerza está detenido e imputado junto a Javier Alarcón por “homicidio calificado, agravado por el uso de armas” y “tentativa de homicidio”.
El mismo abogado de Gómez, Damián Morales, admitió que la situación de su cliente es “muy complicada”. “La situación es delicada para mi defendido, pero la idea es respetar el tiempo de la investigación y ver los pasos a seguir”, sostuvo en diálogo con Cadena 3.
En la causa que investiga la muerte del adolescente Blas Correas el pasado 6 de agosto ya son cinco los acusados. El subcomisario Sergio Alejandro González fue imputado por encubrimiento agravado y omisión a los deberes de funcionario público. La oficial Yamila Florencia Martínez había sido imputada por omisión a los deberes de funcionario público y ahora se amplió la acusación por encubrimiento agravado.
Además, hay tres agentes detenidos: la policía Wanda Esquivel, quien se encuentra acusada por encubrimiento agravado; y Lucas Gómez y Javier Alarcón, imputados de “homicidio calificado en grado de tentativa”.
Por otro lado, se espera que en las próximas horas la fiscalía de José Mana resuelva la imputación de dos empleados de la Clínica Aconcagua bajo el delito de “omisión de auxilio”. Asimismo, podría conocerse la imputación de más efectivos de la Policía de Córdoba pertenecientes a la división Motos.
