Hoy, 17 de mayo es el día mundial de la hipertensión arterial que afecta a un tercio de la población adulta siendo el principal factor de riesgo de las causas de muerte cardiovascular (infarto agudo de miocardio, accidente cerebrovascular o insuficiencia cardíaca). Si bien la hipertensión arterial, posee factores predisponentes, como el sexo masculino, el aumento de la edad, obesidad y factores hereditarios, se puede disminuir su riesgo de aparición a través de estilos de vida saludables. El objetivo de la conmemoración de esta patología, es aumentar la concientización sobre las implicancias de la hipertensión arterial en la salud. En Argentina, las personas tienen conocimiento sobre como la hipertensión arterial es un factor de riesgo pero no se lo percibe como tal, continuando con el hábito de consumir excesivamente sal.
La hipertensión arterial es definida como el aumento persistente del valor máximo de la presión arterial (sistólica) a 140 mm Hg (milímetros de mercurio) o más y/o del valor mínimo (diastólica) a 90 mm Hg o más. El 95% de las causas es desconocida, distinguiéndose como hipertensión primaria mientras que el 5% restante es secundaria a una patología de base como por ejemplo daño renal o suprarrenal.
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La prevención de la hipertensión arterial se basa en dos pilares: actividad física y alimentación saludable; para el tratamiento se complementa con fármacos. En cuanto a la primera, se aconseja realizarla de manera regular durante la semana y practicar aquella actividad que sea de nuestro agrado. En relación a la alimentación, esta debe contener la mayor cantidad posible de alimentos de origen natural debido al gran contenido, sobre todo en frutas y verduras, de Potasio el cual contrarresta el efecto negativo del Sodio en el cuerpo. Es importante saber que los argentinos consumimos 11 gramos de sal por día, esto implica el doble de la cantidad recomendada por la Organización Mundial de la Salud (5 gramos de sal por día). Frente a la recomendación de reducir Sodio en la alimentación, se lo asocia a la sal de mesa cuando en realidad el salero aporta tan solo el 25% del Sodio que ingerimos en el día. Otro 25% proviene de alimentos que por su sabor salado los reconocemos fácilmente, entre estos se encuentran las salchichas, chorizos, morcillas, fiambres, snacks, enlatados y las aceitunas en salmuera. Por último y no menos importante, el 50% del Sodio total del día proviene de panificados (pan, galletitas, facturas, tortas, budines y pizzas) y quesos (sobre todo los duros).
En el año 2017 en Argentina, se reglamentó la Ley Nacional N° 26.905 de Regulación del Consumo de Sodio que plantea la reducción progresiva de la sal contenida en los alimentos procesados, regula la fijación de advertencias en los envases sobre los riesgos del consumo en exceso de sal y promueve la eliminación de los saleros en las mesas de los locales gastronómicos.
Es esencial que conozcamos lo que implica la hipertensión arterial y que acciones llevar a cabo para prevenirla y en caso de diagnóstico confirmado, como tratarla. Por cada gramo de sal que se disminuye en la ingesta diaria evita cerca de 2.000 muertes por enfermedad cardiovascular y ataques cerebrales en la población argentina.
Por: Lic. Brenda Martínez MP: 4059
