En medio de la causa de la muerte de la periodista Débora Pérez Volpin, se realizó un nuevo relevamiento en la clínica. En el operativo se secuestró el endoscopio y algunos estudios ya que no se encontró la grabación del análisis. Aparentemente no se habría grabado.
Según Infobae, en el allanamiento los policías tomaron una tomografía computada y una colangioresonancia que le habrían practicado a la legisladora. Anteriormente, habían sido secuestrados la historia clínica, el libro de enfermería y la hoja de guardia.
Recordamos que los resultados de la autopsia habrían encontrado perforaciones en el estómago y en el esófago de Pérez Volpin.